Jaziel Trasviña Osorio
El fundador del partido sinaloense Héctor Melesio Cuén Ojeda, visitó la ciudad de México en donde sostuvo importantes reuniones con figuras de renombre en la política actual; una de ellas fue con el secretario de Gobernación y aspirante a la candidatura presidencial Adán Augusto López y el dirigente nacional de morena Mario delgado.
En días recientes Cuén Ojeda manifestó abiertamente su apoyo y el de su partido a la posible candidatura del secretario de Gobernación, y en las pasadas elecciones internas de morena, la estructura del PAS operó para que más gente acudiera a votar en ese proceso.
Ese respaldo previamente signado en un compromiso entre ambos partidos, se ha cumplido a cabalidad, pero solamente por parte de las pasistas; los cuales han recibido traiciones y malos tratos de las figuras de Morena en Sinaloa.
¿Entonces por qué Héctor Melesio Cuén y su partido insisten en una alianza en la cual pareciera que no existe la reciprocidad en el respeto? Analicemos.
En primera instancia el compromiso de apoyo bilateral entre ambos partidos se firmó ante la dirigencia nacional de Morena, y ese respeto y trato cordial permanece hasta hoy; prueba de ello es la reunión de trabajo antes mencionada con Mario Delgado.
1.-No existe en el estado la figura de presidente estatal de Morena, por lo que los compromisos se realizaron directamente en la ciudad de México, ya que el gobernador del estado a pesar de emanar de ese partido; no puede asumir la responsabilidad de esos compromisos debido a su posición institucional como gobierno.
2.- Existen dentro del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador diversas corrientes de opinión o “tribus” las cuales se encuentran enfrentadas entre sí, y el PAS y su líder moral no puede, pero sobre todo no debe inmiscuirse en conflictos de otros institutos políticos.
3.-El proyecto político de Cuén Ojeda es primordialmente el estado de Sinaloa, pero su ardua labor al frente de las iniciativas ciudadanas que su partido ha abanderado desde su fundación; deben de tratarse en la capital del país. Por lo que desde hace años el oriundo de Badiraguato ha buscado construir relaciones que le permitan formar puentes de interlocución con los que toman las decisiones en el país.
Pero la más importantes de las razones sin duda alguna es el oficio político de Cuén. Durante años ha buscado acceder a las altas esferas de decisión en el país y un conflicto local no será la razón para romper lazos construidos a base de mucho esfuerzo y diálogo.
Para los que esperaban una abrupta ruptura de la alianza PAS-Morena fueron los primeros sorprendidos por la fotografía de un sonriente Cuén al lado de Adán Augusto y Mario Delgado.
En un universo de 2 mil 741 alcaldes en el país y miles más de regidores, el experimentado político Sinaloense no iba a desperdiciar el valioso tiempo con quizás los hombres más poderosos políticamente hablando después del presidente; para acusar el berrinche de algún presidente municipal, la destitución de dos pasistas en puestos municipales menores o la telenovela de algún regidor traidor. Simplemente no se lo merecen.
