Jaziel Trasviña Osorio.
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¿Qué sorpresa tiene reservada o preparada para la sociedad Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder moral y fundador del Partido Sinaloense? Se le ve más activo. Alegre. Independiente. Listo para las grandes jugadas del 2024 y 2027. Cuén se ve se siente. Brilla con luz propia, con vida política de larga data. El PAS organiza la gran restructuración, la multiplicación de su estructura territorial, que es lo que garantiza ganar elecciones. Es cierto que el PAS viene de una extenuante jornada electoral, la del 2021, en la que fue en alianza con Morena, justa en las que en más de 250 actos políticos Cuén Ojeda pidió el voto a favor de Morena-PAS y su candidato, Rubén Rocha Moya, y en otros, como Culiacán y Mazatlán, que se consideran reservorios políticos pasistas, pidió el sufragio de manera directa para Morena y sus candidatos. La activación del PAS y Cuén Ojeda, como soldado del partido, demuestran que no ha perdido simpatía, que la base militante ahí está, que el Partido Sinaloense está más vigoroso que nunca. El líder moral del PAS se ve fortalecido, sin la carga de la función pública, que quiérase o no desgasta, más en esta época de pandemia
VARGAS Y LA REUNION NACIONAL
Gran demostración de operación política mostró el alcalde de Ahome GVL, al lograr ser el anfitrión de la Asamblea Estatal Sinaloa de la Asociación de Autoridades Locales de México, A.C. AALMAC. Lo relevante de la reunión además de su implícita importancia fue que la presidente nacional de este organismo Mariela Gutiérrez Escalante, en su participación comentó que felicitaba al anfitrión por ser el mejor evaluado del país, sin lugar a duda que las tablas y experiencia política de Vargas Landeros se están dejando ver con este tipo de acciones.
STASAC ADULA A GAMEZ INZUNZA
Todavía no terminaba de sentarse en la silla que le “regalo” el Congreso del Estado cuando voceros del Sindicato del ayuntamiento de Culiacán salieron a decir que celebraban el nombramiento de Juan de Dios Gámez Mendívil como nuevo alcalde de Culiacán. Los adláteres sindicales casi santificaron al nuevo edil diciendo que debería de intervenir en su gremio sindical y resolver todos los problemas habidos y por haber con los que cuenta el STASAC. Veremos que dice la base trabajadora y si están de acuerdo con sus “líderes” lambiscones.
LAS DESAPARICIONES FORZADAS.
Las desapariciones forzadas son una constante en el país y en nuestro estado, pero donde ha tomado tintes alarmantes es en el puerto de Mazatlán, en donde existen denuncias por parte de la ciudadanía que aseguran que son los mismos policías municipales los que participan en estos actos, datos exactos con fechas, horas y número de patrulla no han sido suficiente para que el alcalde Químico Benítez, salga de su letargo y se ponga a trabajar en este delicado tema, que parece que le agrada porque ha de creer que los asesinatos y los “levantones” son los principales atractivos turísticos del municipio.
INZUNZA Y LOS COSTOS DE LA TENEBRA
El secretario general de Gobierno, Enrique Inzunza Cázarez, refleja los costos prematuros de la tenebra: un adelgazamiento de su imagen por lo escandaloso de su forma de operar, por lo tenebroso en su actuar como “operador” político. La judicialización y la criminalización de la política no es buena señal en el ejercicio de un gobierno que presume de demócrata. La treta jurídica armada para deshacerse de Jesús Estrada Ferreiro lo dibujó como Fouché, como el genio tenebroso del Tercer Piso, con el que nadie se quiere topar mucho menos acordar jugadas políticas. El caso Estrada Ferreiro apenas empieza. Inzunza Cázarez y la Fiscal Sara Bruna Quiñonez judicializan “los expedientes” para que el juez de control (o sea el títere del secretario general de Gobierno) abra proceso contra el ex alcalde de Culiacán, que se reporta desde los Estados Unidos. En Sinaloa, en la Fiscalía y en el Tribunal Superior de Justicia, Estrada lleva las de perder, porque son controladas por Enrique Inzunza. El ex presidente municipal llevará a cabo su defensa en los tribunales federales, hasta donde espera llevar al diputado Feliciano Castro Meléndrez, a los integrantes de la Comisión Instructora del Congreso Local y al secretario general de Gobierno, a quien nadie arranca ni siguiera una sonrisa. El semblante de Inzunza es adusto, de pocos amigos.
