Alvaro Aragón Ayala.
El Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Jesús Madueña Molina, estuvo a punto de ser secuestrado o privado de su libertad por fuerzas gubernamentales por lo que se vio obligado a interponer un recurso de amparo para evitar ser plagiado o detenido. Sobre el alto funcionario de la máxima casa de estudios pesan una serie de acciones de persecución política y judicial.
El amparo federal interpuesto por el Rector de la Casa Rosalina se derivó de la denuncia penal que presentó la Auditoría Superior del Estado ante la Fiscalía General de Sinaloa contra él y otras autoridades universitarias bajo el argumento, no comprobado ni sustentado legalmente, de que la UAS se niega a ser revisada por la auditoría estatal, autoridad no facultada para fiscalizar el gasto o el presupuesto federalizado de la institución.
Paradójicamente, la UAS es auditada por la Auditoría Superior de la Federación. En estos momentos, la ASF practica tres investigaciones contables a la Universidad Autónoma de Sinaloa, que corresponde a una revisión del fondo de las aportaciones múltiples (obras), la auditoría forense “peso por peso” y el timbrado de nómina.
La demanda ante la Fiscalía contra el Rector, obviamente para intentar endilgarle un delito, se interpuso luego de que el 30 de marzo personal de la Auditoría Superior del Estado armó un show en la Dirección de Asuntos Jurídicos para fabricar el argumento de que la UAS se negaba a ser auditada.
El amparo federal a favor del Rector Jesús Madueña Molina fue solicitado al Poder Judicial de la Federación y quedó registrado con el expediente 281/2023, en el que se asienta que lo intentaron secuestrar el pasado 31 de marzo del presente año.
“…personas que se dicen agentes de la Policía de Investigación, estatales, federales y municipales, y hasta soldados, se presentaron en las instalaciones de mi domicilio personal con el propósito de privarme de mi libertad sin expresar el motivo que tenga para ello, llevando unas ÓRDENES DE APREHENSIÓN…”
Lo declarado por el rector de la UAS en este recurso interpuesto, lo hizo ante un juez bajo protesta de decir verdad. En este recurso de amparo en contra de órdenes de aprehensión, incluye juzgados penales de Sonora.
El gobierno del Estado en colusión con diputados de Morena y el PRI del Congreso del Estado y la Fiscalía General de Justicia emprendieron una auténtica persecución política contra el Rector de la UAS y otras autoridades de la institución ante la negativa de las autoridades de la Casa Rosalina a aceptar la Ley de Educación Superior de Sinaloa (LESE).
Dicha ley, atentatoria a la autonomía universitaria, faculta al Congreso del Estado para normar las consultas universitarias para elaborar una nueva ley Orgánica de la UAS o reformar la que actualmente está vigente. Los fundamentos leguleyos asentados en la LESE permiten a los diputados de Morena manufacturar una Ley Orgánica Foránea para tomar el control académico y administrativo de la máxima casa de estudios.
La demanda penal contra el Rector se inscribe en el mismo escenario de la Ley Superior de Educación Estatal. La Fiscalía General de Justicia es el instrumento mediante el cual los diputados del Congreso Local y funcionarios estatales pretenden encarcelar a Jesús Madueña Molina por el “delito” de defender la autonomía universitaria e impedir que la ASE le fabrique desfalcos inexistentes a la UAS.
La pretensión de detención de Madueña Molina, fuera de todo marco Constitucional, adquiere el rango de tentativa “secuestro de Estado” o de plagio gubernamental dado que la Fiscalía aun no puede justificar la citación del Rector por el delito de abuso de autoridad que le imputa la ASE.
La propia titular de la Fiscalía General del Estado, Sara Bruna Quiñónez Estrada, declaró que todavía se encuentra recabando información para ver si la denuncia penal contra el Rector de la UAS, Jesús Madueña Molina, está o no justificada para proceder en su contra. “La estamos trabajando; hemos avanzado. Se le está poniendo bastante atención a este caso”, dijo.