La Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) avanza en su estrategia legal al conceder el Juez Tercero de Distrito suspensión provisional a los amparos promovidos contra actos de la Auditoría Superior del Estado (ASE) y contra la Comisión de Fiscalización del Congreso del Estado, con el que se detiene el proceso sancionador en contra de la institución y se ordena a las autoridades dejen de realizar declaraciones maliciosas o sesgadas que denosten a la Universidad.
El abogado general de la UAS, doctor Robespierre Lizárraga Otero, explicó que la ASE ha estado intentando realizar una auditoría a los recursos propios de la Universidad, la cual a través del equipo de abogados ha documentado y fundado legalmente que no tiene atribuciones para ello emitiendo este órgano fiscalizador un proceso administrativo.
“Los actos que han venido suscitándose a partir de ello desde la Universidad los calificamos como irregulares e ilegales, pero ya no nada más en la Universidad, también los jueces de Distrito se posicionan en el sentido de que se suspenda la resolución del procedimiento administrativo que está promoviendo la Auditoría Superior del Estado”, dijo.
Adicionalmente se otorga suspensión para que no se realicen declaraciones maliciosas o sesgadas ante los medios de comunicación que denosten la honorabilidad de la Universidad, lo cual Lizárraga Otero consideró relevante porque la justicia federal empieza a tomar posición respecto a lo que la Universidad argumenta del actuar ilegal de la ASE.
“Es relevante, hay que decirlo, esta etapa de los juicios de amparo que se han promovido porque inicia este proceso dándole la razón de entrada a la Universidad Autónoma de Sinaloa”, expresó al exponer que la ASE quiere señalar una responsabilidad administrativa, incluso hasta penal, y ahora todo eso está suspendido a partir de lo que el Juez decretó.
“Se concede la suspensión de los actos que reclamamos, en este sentido, las actuaciones de la ASE y la Comisión de Fiscalización si bien, no paralizando el procedimiento administrativo de origen, pero sí instruyendo que se abstengan de dictaminar resolución definitiva respecto a ese procedimiento, o sea, no pueden ellos sancionarnos en tanto no se agote este juicio de amparo”, detalló.
En una analogía, el abogado manifestó que como en un juego de beisbol, en cada entrada la Universidad se ha mantenido con ventaja, no ha caído el último out, pero el juego siempre lo ha ido ganando la Universidad, porque su defensa legal ha sido eficiente y con estas resoluciones queda así ratificado por los jueces.
“A partir de las resoluciones que hoy se están generando, hay que decirlo, se continúa perfilando que la Universidad Autónoma de Sinaloa, en esta confrontación con el aparato gubernamental en donde está siendo víctima de una persecución política, se perfila que la razón jurídica le asiste”, reiteró.
Por su parte el abogado Milton Ayala, expresó que la comunidad universitaria y la sociedad en general deben estar contentos porque los tribunales hacen que se respete la Ley sobre los actos arbitrarios de las autoridades, “ese es el fin del juicio de amparo que los arbitrarios no se salgan con la suya, que se haga respetar la ley y sobre todo la Constitución”.
A su vez el licenciado Ramón Bonilla Rojas, opinó que estas resoluciones son importantes porque la Universidad está en la defensa jurídica de su Autonomía recurriendo a la justicia federal para que sea un experto en derecho constitucional, un perito en materia de temas constitucionales, como es un juez de distrito, quien decida quién tiene la competencia de auditar los recursos propios de la UAS.
“Otro de los efectos de la suspensión provisional es que se le prohíba a la Comisión de Fiscalización y a la Auditoría que dejen de estar declarando, o manifestando, de manera sesgada o maliciosa, expresiones que puedan afectar la honorabilidad de la Universidad (…) y ¿por qué nos otorgaron la suspensión en ese efecto? Porque le comprobamos que tanto al Congreso como a la Auditoría les gusta mucho salir a los medios a hacer declaraciones sesgadas o maliciosas para crear la percepción de que aquí hay corrupción y que aquí no somos transparentes cuando la realidad así no es”, puntualizó.