Richard Lizárraga Peiro.
Por no estar de acuerdo en la prefabricación de delitos o “expedientes” penales contra funcionarios de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Nereida Avilés Aceves, Fiscal Anticorrupción de Sinaloa, solicitó su retiro a la Fiscal General Sara Bruna Quiñónez Estrada.
La renuncia se autorizó el mismo día en el que se intenta “judicializar” el primer caso de presuntos actos de corrupción en la Universidad Autónoma de Sinaloa, en el que se acusó a dos rectores y al comité de adquisiciones de la institución con una denuncia integrada con “recortes de periódicos”, principalmente.
La dimisión se hizo a través del Instituto de Pensiones de Sinaloa, como un “retiro anticipado”, según se confirmó con el área de prensa de la Fiscalía General de Justicia que también está involucrada en los montajes periodísticos contra la UAS.
Avilés Aceves consideraba que no había elementos para judicializar el “Caso UAS” por el que se friccionó con Sara Bruna Quiñónez. Nereida fue obligada también a llevar los casos de los ex alcaldes Jesús Estrada Ferreiro y Luis Guillermo Benítez Torres (de Culiacán y Mazatlán.
La carrera de Avilés Aceves se hizo prácticamente en el Ministerio Público, donde comenzó a laborar desde 1996 como auxiliar de agente.
Dos años después de su entrada se convirtió agente titular y fue hasta 2004 cuando comenzó incursionar en otras áreas de investigación del fuero común. 10 años después recibió nombramientos como directora de Carpetas de Investigación, luego titular provisional de la Fiscalía en Delitos Electorales y en 2021 se le dio el nombramiento de Fiscal Anticorrupción.
Este último cargo, de acuerdo con la Ley Orgánica de la Fiscalía General, tiene una jerarquía especial, solo debajo de la Fiscal General.
El puesto quedó vacante, pues la Fiscalía General no ha hecho un nombramiento específico.