Oscar Cedillo.
En 10 días de precampaña no se puede negar que la dupla Samuel García/Mariana Rodríguez logró igualar y superar —en lo que a presencia en las conversaciones de redes sociales se refiere— al fenómeno que en su momento representó la candidata de la alianza opositora, Xóchitl Gálvez, y con un impulso que se trasladó a las tendencias de voto por la Presidencia.
Diversas encuestas internas a las que tuvo acceso esta columna señalan que Samuel García en algunos sondeos aventajó a Xóchitl Gálvez hasta por dos puntos porcentuales, lo que despertó el breve sueño de un Movimiento Ciudadano mucho muy poderoso.
Si las tendencias se mantenían, el movimiento naranja de Dante Delgado caminaba con posibilidad real de convertirse en la segunda fuerza política del país. La clave está para ellos en la conformación del Congreso federal.
Movimiento Ciudadano ya funciona en cierta medida como llave legislativa; su poder se incrementaría si sus huestes logran obtener una votación por arriba de 20 por ciento en 2024. Sin duda, la proporción es atractiva hasta para Andrés Manuel López Obrador y para Claudia Sheinbaum Pardo, en especial por sus proyectos de cambios constitucionales.
PAN, PRI y PRD tienen claro también esto y representándoles un grave riesgo, decidieron apretar a Samuel García desde un Congreso de Nuevo León respaldado en la resolución emanada de la Suprema Corte de Justicia, que le reconoció en el último minuto la facultad constitucional de ser quien eligiera al candidato interino.
El hecho consumado de que Luis Enrique Orozco rindiera protesta como tal, al tiempo que Samuel García renunciara a la licencia, a la precandidatura presidencial de MC, y regresara al cargo —todo a un mismo tiempo—, tiene a Nuevo León sumido en una crisis política, donde, en papel, ambos comparten funciones de gobierno.
Todavía falta lo que falta. Porque nadie va a poner la otra mejilla.
Palabras clave
Desde Nuevo León nos dicen que no se ha dicho la última palabra, que Samuel García dará la pelea ante el Poder Judicial y que, aunque no tenga la posibilidad de aparecer en la boleta 2024, aquel y su esposa, Mariana Rodríguez, colocarán toda la fuerza política y mediática en el candidato que designe a la presidencia Movimiento Ciudadano. Entretanto, hoy se reúne la Convención Nacional de MC y es posible que de ahí surja el nuevo precandidato para la Presidencia.
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